Hola!!!!!
Hoy estoy especialmente feliz. Es mi día 150 y voy superando mis propias espectativas en la experiencia de compartir una receta diaria con vosotros.
Mis deseos de entrar en la escuela de cocina han sido infructuosos por segundo año consecutivo, pero seguro que lo consigo en el futuro. Mientras tanto tendré tiempo que dedicar a este blog para que quede lo mejor posible.
Mi esposo me ha propuesto editar un libro con todas las recetas al acabar mi proyecto ya que le gusta mucho el resultado. Si no encontramos editor, está animado a autoeditarlo para tener un recuerdo que persevere en el tiempo.
Para celebrar tanta felicidad he intentado reproducir sin azúcar un postre riquísimo que probé en una ocasión. El resultado ha debido ser cuanto menos aceptable porque mi marido se lo ha vuelto a comer todo sin dejar ni una pizca!
INGREDIENTES
300 gr de chocolate blanco con edulcorante.
400 gr de nata para montar.
15 Galletas maria sin azucar.
150 ml de leche.
1 Cucharada de mantequilla.
Almendras picadas para decorar.
Edulcorante líquido al gusto.
15 Galletas maria sin azucar.
150 ml de leche.
1 Cucharada de mantequilla.
Almendras picadas para decorar.
Edulcorante líquido al gusto.
PREPARACION
Montamos la nata y le agregamos edulcorante líquido al gusto.
Nota: La nata debe estar bien fría para que se monte con facilidad.
Agregamos el resto de la leche y unas 4 cucharadas de chocolate blanco fundido en un bowl, mezclamos bien y mojamos las galletas en esta preparación para que no estén secas.
Elegimos los recipientes a utilizar, colocamos de base una galleta luego una capa gruesa de nata, de nuevo otra galleta, más nata, y la ultima galleta y luego bañamos todo con el chocolate blanco. Podemos colocarle para decorar un punto de nata y sobre éste almendra picada.
Realizamos este procedimiento hasta acabar con los ingredientes. Introducimos en la nevera y dejamos enfriar un par de horas antes de servir.
Mi impresión es que este postre es muy fácil de hacer siguiendo paso a paso las proporciones y las medidas. Es increíble la cremosidad y la riqueza del sabor tan intenso como la del chocolate blanco...es maravilloso.
A Disfrutar!!!!!
FOTOS DANIEL ANARTE
Derretimos a baño maría el chocolate con 50 ml de leche y la cucharada de mantequilla. Removemos con unas varillas para evitar que se formen grumos. Cuando notemos que el chocolate tiene la textura deseada retiramos del fuego y dejamos reposar.
Montamos la nata y le agregamos edulcorante líquido al gusto.
Nota: La nata debe estar bien fría para que se monte con facilidad.
Agregamos el resto de la leche y unas 4 cucharadas de chocolate blanco fundido en un bowl, mezclamos bien y mojamos las galletas en esta preparación para que no estén secas.
Elegimos los recipientes a utilizar, colocamos de base una galleta luego una capa gruesa de nata, de nuevo otra galleta, más nata, y la ultima galleta y luego bañamos todo con el chocolate blanco. Podemos colocarle para decorar un punto de nata y sobre éste almendra picada.
Realizamos este procedimiento hasta acabar con los ingredientes. Introducimos en la nevera y dejamos enfriar un par de horas antes de servir.
Mi impresión es que este postre es muy fácil de hacer siguiendo paso a paso las proporciones y las medidas. Es increíble la cremosidad y la riqueza del sabor tan intenso como la del chocolate blanco...es maravilloso.
A Disfrutar!!!!!
FOTOS DANIEL ANARTE
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